El arte del flamenco, arraigado en la esenia de Sevilla, se ha mantenido como un tesoro cultural a lo largo de los siglos. En este artículo podrás conocer la historia del flamenco en Sevilla y los tres mejores bares donde puedes vivir esta experiencia en primera persona.

La historia de los tablaos flamencos en Sevilla ha sido una montaña rusa de altibajos. En los años setenta estos lugares eran refugios para los mejores artistas flamencos y amantes de la música nocturna. Sin embargo, con la llegada de la democracia, muchos de estos artistas, contratados por las administraciones públicas, abandonaron los tablaos. Esto dio paso a una era en la que los tablaos se llenaron de artistas de segunda categoría y espectáculos diseñados exclusivamente para turistas.
Actualmente, el flamenco ha resurgido en Sevilla. Los mejores cantaores, bailaores y guitarristas han regresado a los escenarios más íntimos y cercanos, con tablao para no más de 70 personas. Esta tendencia ha devuelto al flamenco a sus raíces, donde la calidad artística prevalece sobre el producto envasado. En Sevilla, la cuna de las tonás y las sevillanas, puedes disfrutar de esta experiencia única en los mejores tablaos.

El Museo de Baile Flamenco de Cristina Hoyos es un lugar imprescindible para entender y apreciar el arte de este baile.
Además, no puedes perderte la Bienal de Flamenco. Este evento es una celebración masiva del arte flamenco, con concursos, espectáculos, seminarios y mucho más.

Los mejores bares para disfrutar del auténtico Flamenco

La Flamenquería

Ubicada en el barrio de Triana junto al río Guadalquivir, es un rincón dedicado a la difusión y creación del flamenco en Sevilla. Desde su apertura en 2014, ha funcionado como escuela de flamenco y bar de alto nivel artístico. Su moderna decoración se combina con la estética andaluza para crear el ambiente perfecto para disfrutar de las actuaciones de flamenco.
En el interior, encontrarás un tablao tradicional, sillas de madera y una energía única que envuelve cada actuación. La Flamenquería se ha convertido en un espacio donde los artistas de flamenco ofrecen actuaciones de alto nivel, garantizando una experiencia auténtica.

Sala Rejoneo

Todos los viernes, sábados y domingos a las cinco de la tarde, este local en la Calle Betis te espera con una experiencia de Flamenco. Combina la tradición musical con la vanguardia hostelera, ofreciendo dos horas de flamenco intenso.
En un ambiente auténtico y recogido, podrás disfrutar de cantaores consagrados y promesas de la escena flamenca. Además, si te animas, podrás unirte al baile de las sevillanas al ritmo de la guitarra. La Sala Rejoneo es un rincón donde el flamenco se vive con pasión y autenticidad.

Orillas de Triana

En el corazón del barrio de Triana, a la orilla del río Guadalquivir, se encuentra otro de los mejores bares de flamenco: Orillas de Triana. Este establecimiento ofrece actuaciones con cuatro artistas flamencos con una hora de espectáculo.
Durante la actuación, los intérpretes realizan solos de guitarra y cante, creando un espectáculo que te erizará la piel. La ubicación junto al río y la pasión que se vive en cada actuación hacen de Orillas de Triana un lugar inolvidable para experimentar el flamenco en su máxima expresión.

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